No son las uvas que saben amargas, ni la mucha o poca lluvia, es la economía de la pandemia la que sacudió el negocio del vino y una serie de políticas domésticas de más larga data que podrían ser motivo de discusión. Patricia Ortíz, presidenta de Bodegas Argentinas, sintetiza el asunto con una delicadeza y sin rodeos: "la vitivinicultura atraviesa momentos complejos".
Lo dijo durante el tradicional agasajo que realiza la entidad desde 1936 al inicio de la esperada Fiesta de la Vendimia, evento anual por el que se moviliza casi toda la provincia de Mendoza.
"Bodegas de Argentinas se ha adaptado bien a la pandemia, aunque hubo un efecto negativo en toda la cadena de la industria. Hubo apoyo para mitigar el impacto nacional y provincial", comenzó explicando Ortiz en Bodega Trivento, sede del encuentro.
En palabras de la empresaria, “la vitivinicultura, más allá de los números que muestran un crecimiento de volumen en el último año, que no compensa la caída que el sector viene teniendo en los últimos diez, atraviesa momentos complejos". También contó que “si bien creció el consumo por encima de los 20 litros, el gasto por habitante registró su menor nivel desde el 2015”.
Y luego pidió auxilio: "la vitivinicultura necesita políticas a largo plazo, como bajar la carga impositiva. La industria hace una década que exporta el 15% menos que hace 10 años y se cae el consumo interno".
La empresaria reconoció que el sector al que representa, entiende "la complejidad y la lucha por controlar la inflación" y recordó que acompañó "al Gobierno y al país en un año difícil, como fue el 2020".
"Bodegas de Argentina trabajó y lideró el sector, junto a la Secretaría de Comercio Interior, para poder deslistar los vinos de precios máximos e integrar el programa de precios cuidados, esto gracias al compromiso de diez bodegas”, aseguró Ortiz.
La empresaria cuestionó a la Corporación Vitivinicola Argentina (Coviar): "Destinamos fondos a la Coviar que se encarga de dilapidar los recursos. Hay un desmanejo de la entidad. Basta del atropello de unos pocos. Deberían pedir disculpas y acceder a los pedidos de cambio en el reglamento interno, no los de la ley, para asegurar su cumplimiento y correcto e idóneo uso de los fondos. O dar un paso al costado y permitir que un directorio sin conflicto de intereses trabaje para salir de esta crisis”.
La Coviar es un organismo público-privado integrada por trece entidades privadas el Inta, y representantes de las provincias productoras de vino y el gobierno nacional.
"Se nos menciona como un grupo que se autoexcluyó (de la Coviar) y que supuestamente no conoce la realidad del sector", se quejó Ortiz para luego remarcar que "olvidan decir que los que se ‘autoexcluyeron’ representan el 90% de la exportación y el 70% del mercado interno; los excluidos somos, de la industria, quienes más empleo y los que más divisas contribuimos al país”.
Apoyo presidencial a la Coviar
Ese mismo día, el presidente Alberto Fernández respaldó un plan estratégico vitivinícola con miras a 2030, que busca alcanzar en los próximos 10 años un consumo interno de 1.000 millones de litros y generar exportaciones por 1.380 millones de dólares.
Fue durante la presentación del Plan Estratégico Vitivinícola 2030, ideado por la Coviar. En el acto, realizado en el marco de la tradicional Fiesta Nacional de la Vendimia, Fernández invitó a todas las partes, productores de vid, industriales, gobernadores provinciales y Estado nacional, a "que este plan sea debatido y sea ejecutado".
El mandatario dijo que ya logró acuerdos "con sectores industriales muy poderosos", porque ya casi está por enviar al Congreso la ley para sancionar el plan estratégico de la industria automotriz y que su Gobierno ha avanzado con el plan estratégico de la agroindustria. Y sugirió que "el proyecto de la industria de la vitivinicultura sea el tercer proyecto de ley" a llevar adelante en una mesa de concertación con todas las partes.
El sector vitivinícola se encuentra dividido respecto de este plan luego de que no se cumplieran los objetivos del plan para 2020, que habían consensuado los principales actores de la cadena, según reportan medios mendocinos.
"Tenemos que darle fuerza, darle potencia a toda la actividad de la vitivinicultura donde aparecen, a veces, separados, pero no debieran estarlo los que producen la uva e industrializan el vino", dijo el presidente.
Fernández apoyó el plan que beneficia no sólo a la provincia de Mendoza, sino también a las provincias productoras de vino como San Juan, Catamarca, La Rioja y Salta. Y también a las del sur que producen "los vinos fríos". "Este desarrollo es central", también para el país porque el vino se exporta y permiten ingresar divisas "que tanto necesitamos en este tiempo".
Por otra parte, el vicepresidente de Bodegas de Argentina, Francisco Do Pico, dijo a Télam que "venimos trabajando con el Gobierno Nacional hace más de un año y medio, y en conjunto con ellos hemos logrado varias cosas, y podemos decir que lo hacemos muy bien”.
"Se duplicaron los reintegros a las exportaciones, lo cual ha sido muy beneficioso para ayudarnos a sacar de vinos de la Argentina y exportarlos al mundo; y al mismo tiempo todo este año trabajamos con el Ministerio de la Producción y el de Agricultura para trabajar en el descongelamiento de precios y sacar el vino de lo que es Precios Máximos”, añadió.
El encuentro contó con la presencia del gobernador de Mendoza, Rodolfo Suárez, y gran parte de su gabinete. |
