Jair Bolsonaro partió en helicóptero desde la costa de Santa Catarina –donde se encontraba descansando junto a su esposa Michelle y su hija Laura–, durante la madrugada de este lunes rumbo Joinville para abordar el avión presidencial que lo trasladó hasta San Pablo donde fue internado debido a fuertes dolores abdominales. Su diagnóstico actual no es grave, se trata de una obstrucción intestinal que lo obligó a anticipar el fin de sus vacaciones.
La hospitalización, producida alrededor de las 2:00, fue confirmada por el cirujano Antonio Luiz Macedo, quien acompaña a Bolsonaro desde que lo apuñalaron en plena campaña presidencial en septiembre de 2018.
En junio pasado, Bolsonaro también fue hospitalizado por una obstrucción intestinal y fue sometido a un tratamiento convencional y sus médicos descartaron una cirugía tras responder bien a los cuidados. Finalmente recibió alta al cuarto día.
En septiembre de 2020, además, el mandatario fue sometido a una quinta cirugía en Sao Paulo, pero para la extracción de un cálculo renal, y ese mismo año se sometió a una vasectomía.
Bolsonaro fue acuchillado mientras era llevado a hombros por una multitud en un mitin electoral celebrado en la localidad de Juiz de Fora, en el estado de Minas Gerais. El agresor fue detenido inmediatamente después del ataque, pero fue declarado inimputable, pues el juez consideró que no estaba en capacidad de responder por sus actos debido a sus problemas mentales.
El cirujano del presidente, quien se encuentra de viaje en las Bahamas, afirmó que este lunes por la mañana volará a la capital Paulista y que aterrizará allí por la tarde. |