Es que el primer mandatario brasileño no puede dejar de sorprender con sus ocurrencias y eso quedó más que evidente en su paso por Roma durante la reunión del llamado G20, que reúne a las principales economías del mundo, donde se denotó que el ultraderechista ha sido aislado del escenario global, y que realmente “Brasil no es la solución al cambio climático”.
Pero el camino a las elecciones del 2022, está a la vuelta de la esquina y Bolsonaro sigue restando puntos a su reelección, no solo con la aparición de un tercer candidato que busca la revancha, el ex juez Sergio Moro, sino por todas las acusaciones que ha recibido por parte de la Corte brasileña los últimos meses que han dejado su imagen por el piso.
Los crímenes de lesa humanidad cometidos por desconocer una pandemia que cobraba día y noche nuevas vidas, la negación a las vacunas, el atentado al Amazonas y el rechazo a la comunidad LGTBQ, fueron solo algunos de los temas que marcaron su gestión durante estos dos años y que culminaron con una imagen completamente negativa y el pedido ferviente de los brasileños al son de ¡Fora Bolsonaro! ¡Viva Lula!
Pero eso no fue todo y de manera hipócrita casi irónica, en las últimas horas, el presidente se auto otorgó la condecoración del Ministerio de Ciencia y Tecnología, la Medalla al Mérito Científico. Para no sentirse tan solo en su “autodenominación”, condecoró por Decreto al ministro-astronauta Marcos Pontes y al ministro de Economía, Paulo Guedes, entre otras personalidades nacionales de la Orden.
Lo cierto es que habiendo tantos médicos, científicos y personajes públicos que realizaron verdadero aporte a la ciencia y tecnología de Brasil, el primer mandatario realice una burla indescriptible sobre el pueblo y desconozca los verdaderos méritos de su país. |