La India registró este el primer descenso de casos de Covid en una semana, casi 30.000 menos que el día anterior con un total de 323.144 nuevos contagios, mientras que también se produjo la primera bajada de fallecidos en 14 días, con 41 menos que las últimas 24 horas, hasta un total de 2.771 muertos.
Estos datos positivos se producen durante la peor fase de la pandemia en la India, que eleva el total acumulado a los 17,6 millones de casos y 197.894 muertes, según informó el Ministerio de Salud indio.
El país se ha convertido en el epicentro global de la pandemia ante el feroz avance del virus que, en cuestión de semanas, ha multiplicado la tasa de positivos dramáticamente, reportando cifras récords y provocando un colapso sanitario en los hospitales de las regiones más afectadas, como Nueva Delhi o la occidental Maharashtra.
El máximo responsable de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, subrayó el lunes la situación "más que desgarradora" que vive la India, cuyos datos representan en la actualidad más de un tercio del total global de infecciones.
La crisis sanitaria que vive el país ha dejado imágenes de hospitales saturados y masivas cremaciones que han despertado el apoyo internacional y el anuncio de ayuda de varios países, que se comprometieron a enviar suministros médicos necesarios.
Entre esos envíos está la llegada de un cargamento con suministros médicos procedente de Reino Unido, que incluye 100 ventiladores y 95 concentradores de oxígeno, según anunció en Twitter el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores indio, Arindam Bagchi.
Además, el primer ministro indio, Narendra Modi, mantuvo anoche una conversación telefónica con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, para ratificar el compromiso de ayuda del país norteamericano.
Durante la conversación con Biden se "subrayó la importancia de las cadenas de suministro fluidas y eficientes de materias primas para vacunas y medicamentos. La asociación en atención médica entre la India y EE.UU. puede abordar el desafío global de la covid-19", anunció Modi en su cuenta oficial de Twitter.
El país asiático ve en su campaña de vacunación la principal herramienta para paliar la pandemia. Hasta el momento, se han administrado 142 millones de dosis desde que dio inicio el pasado mes de enero, 3,3 millones de ellas en las últimas 24 horas.
China camino a ser potencia mundial en 2030...
En los últimos días, la India sufre un déficit de materiales sanitarios básicos necesarios para hacer frente a la pandemia, en medio de una nueva oleada de infecciones. Es por ello, que Pekín envió 800 compresores a Delhi, por vía aérea a través de Hong Kong, "y llegarán otros 10.000 en una semana", apuntó el diario local The Paper.
China "ayudará a la India a adquirir todo tipo de materiales antiepidémicos necesarios, y le proporcionará el apoyo y la asistencia necesaria", aseguró el portavoz de la embajada de China en la India, Wang Xiaojian.
Las ya de por sí tensas relaciones entre ambas potencias nucleares asiáticas se han deteriorado en los últimos tiempos, especialmente tras unos enfrentamientos fronterizos a mediados del año pasado que dejaron bajas entre militares indios y chinos.
Pero ¿se trata de altruísmo, de hacer olvidar al mundo el lugar en el que se originó la pandemia o hay algo más allá? Oliver Stuenkel, profesor de Relaciones Internacionales en la Fundación Getulio Vargas, en São Paulo, admite que parte del proceder de China se debe a un intento de mejorar su imagen.
Pero, por otro lado, "cualquier país que aspire a un lugar de poder en el ámbito internacional, no solo debe ser fuerte económica y militarmente, sino que también debe asumir una posición de generosidad. Ahora mismo las mascarillas, los insumos médicos, son los bienes más importantes que existen. La demanda es muy elevada y China utiliza esta situación para reforzar su papel político a largo plazo", dice Stuenkel a Deutsche Welle.
Según la OCDE, China será la primera potencia mundial en 2030. ¿Podría la pandemia suponer un punto de inflexión en ese camino?|