Eran cerca de las 21 horas en las inmediaciones del Teatro Caupolicán, donde se presentaba el salsero Maelo Ruiz, cuando la central de Comunicaciones de Carabineros recibió el llamado de vecinos alertando disparos en la calle.
Al lugar acudió un grupo de funcionarios, entre ellos el cabo 1° Daniel Palma, motorista, quien pertenecía a la Cuarta Comisaría de Santiago. El policía se acercó a un vehículo de marca Audi para realizar una fiscalización, pero los sujetos que iban en su interior se habrían negado.
Según el informe de Carabineros, de manera sorpresiva una de las personas del interior del auto le disparó directo en el rostro en dos ocasiones, sin que el funcionario tuviera tiempo para reaccionar.
El cabo Palma llevaba puesto su casco de servicio, pero de acuerdo a las autoridades policiales, el mismo no está equipado para repeler balas.
De inmediato fue trasladado a un centro asistencial donde fue operado, pero finalmente falleció cerca de las dos de la madrugada.
Daniel Palma es el tercer mártir de Carabineros en menos de un mes, después de las muertes de la sargento Rita Olivares y el cabo Alex Salazar.
Plan de seguridad
La ministra del Interior, Carolina Tohá, anunció una intervención en las 30 comunas de más alta criminalidad en la capital.
El Gobierno había anunciado un plan de seguridad hace algunos días que incluía un piloto en Santiago Centro, pero luego de conocerse de un nuevo asesinato de un funcionario policial, los planes se adelantaron y la intervención se ampliará a más comunas.
“Abarcará a comunas que concentran un tercio de la población nacional y un 50% de los delitos más violentos que hay en Chile. La intervención que vamos a hacer se basa en evidencia que nos muestra cuáles son los factores presentes en los territorios donde existen más presencia de delitos violentos”, dijo Tohá.
El objetivo de esta intervención es reforzar la persecución penal. “Vamos a tener focos investigativos especialmente donde hay tráfico de armas, focalizar la persecución para esclarecer homicidios y delitos violentos y para eso el trabajo coordinado que ya tenemos funcionado con Fiscalía será reforzado y acelerado”, agregó la ministra.
Otras intervenciones incluirán la “ruta del dinero” con el fortalecimiento del Servicio de Impuestos Internos y Aduanas para poder mejorar la fiscalización de armas.
Además de adelantar la intervención masiva en la capital, el Gobierno decidió adelantar la promulgación de la polémica Ley Naín-Retamal que se despachó ayer miércoles desde el Congreso Nacional.
Parlamentarios de izquierda se mostraron contrarios a aprobar esta iniciativa que ellos denominan “gatillo fácil”. Esto debido a que uno de los artículos indica que funcionarios policiales no serán imputados en caso de provocar la muerte de una persona dentro de su función policial.
El Gobierno presentó diversas indicaciones que fueron rechazadas por la derecha, pero finalmente acordaron una redacción que permitía su final aprobación.
Sin embargo, fuerzas políticas que apoyan directamente al Presidente Boric como el Partido Comunista y el Frente Amplio se declararon en rebeldía y votaron en contra.
Incluso anunciaron que recurrirán al Tribunal Constitucional para impugnar la ley. “Es una licencia para matar, está más acotado, pero seguimos creyendo que es una licencia”, expresó el diputado PC Boris Barrera.
Estado de Excepción
Otra de las medidas que suenan con fuerza luego de la muerte del cabo Daniel Palma es el Estado de Excepción, que permite que las Fuerzas Armadas colaboren con las labores de seguridad.
Actualmente en dos regiones del sur de Chile existe esta condición que ha permitido que los atentados bajen, aunque siguen produciéndose incidentes.
Si bien en días anteriores el Gobierno no había querido pronunciarse al respecto, la actitud habría cambiado en las últimas horas. “No tenemos complejo de ocupar todas las herramientas”, aseguró la ministra del Interior.