Lo más probable es que las comilonas y los excesos navideños te hayan dejado unos kilos de más (entre medio y 3, según los estudios) y una desagradable sensación de hinchazón. No te desesperes ¡todo tiene solución! Aunque no todo vale: "Hay que huir de las dietas milagro", advierte Sonia Cibrián, especialista en Nutrición de MediQuo, que aboga por adoptar "hábitos saludables".
Además se aconseja ponerse en manos de un profesional para recuperar no solo la talla ideal, sino un estado óptimo de salud: "Siempre es necesario realizar una mejora global de la alimentación e intentar mantener los buenos hábitos para evitar el efecto acordeón".
1. Beber mucha agua
Beber agua entre horas así como antes y después de las comidas ayuda a la digestión, evita el estreñimiento y ayuda a la eliminación de líquidos. Pero, ¿cuánta? “Unos ocho vasos”, indican. También podemos consumirla en forma de infusiones (té verde, té rojo o cola de caballo son las más adecuadas).
2. Frutas, verduras y hortalizas
Hay que incluirlas a diario en nuestra alimentación e intentar que esta sea "lo más natural posible". Al basarnos en alimentos frescos (y mejor "de temporada"), conseguimos el beneficio del aporte de vitaminas, minerales, macronutrientes y fibra necesarios para el correcto funcionamiento de nuestro organismo. Por cierto, la fruta mejor tomarla entera en lugar de en zumo.
3. Comer comida casera
Es importante "programar qué vamos a comer cada día y usar siempre productos frescos cocinados en casa", explican los especialistas. Las cocciones han de ser lo más sencillas posibles (plancha, vapor o cocidas), con poco aceite (siempre de oliva), y en cantidades adecuadas para saciarnos sin excesos.
4. Cinco comidas diarias
No hay que saltarse comidas, como la merienda de la tarde, o tomar algo a media mañana. Una fruta, unos pocos frutos secos (4-6 nueces o almendras) o 1 yogur desnatado son opciones ideales para estos momentos. Esto nos ayudará a mantenernos saciados y no comer en exceso en la siguiente comida.
5. Alimentos prohibidos
Es necesario eliminar el consumo de bebidas azucaradas/edulcoradas o con alcohol, así como los productos tipo snack, bollería industrial, embutidos grasos, frituras, rebozados, empanados y todos aquellos alimentos industrializados que contienen gran cantidad de azúcares, grasas, aditivos y conservantes en su composición. Por supuesto, los dulces que nos han sobrado de las Navidades también entran en esta categoría. "Con estas medidas evitamos la sobrecarga del hígado por consumo de alcohol y alimentos excesivamente grasos, y protegemos el páncreas de los excesos de azúcares simples", explica.
6. Alimentación variada.
Una dieta rica y variada es el mejor antídoto contra el aburrimiento que, muchas veces, desemboca en el abandono de una dieta, advierten los mismos especialistas.
7. Ejercicio físico
Si en un periodo détox añadimos ejercicio diario adaptado a cada uno, como un buen paseo, "el efecto será mucho más positivo", afirman, pero también aconseja "evitar el tabaco".
Dieta Detox:
-Desayuno: Para empezar el día lo mejor es un desayuno con fruta fresca, cereales (tostadas integrales con aceite de oliva o copos de avena) y un lácteo. Si tomas café o infusiones, mejor dejar de lado el azúcar.
-Almuerzo: A la hora de la comida hay que recordar que siempre debemos incluir verdura (es recomendable que al menos una vez al día tomemos hortalizas crudas, como una ensalada), hidratos preferiblemente integrales (pasta, arroz, pan, legumbres…) y proteína vegetal o animal. De postre, una fruta es ideal.
-Cena: Para la cena tomaremos también verduras y proteína, con una porción menor de hidratos que a mediodía. Una ensalada o unas verduras al vapor con un poco de pescado, pavo o pollo a la plancha, o una tortilla, y un trozo de 2 dedos de pan integral son perfectos para antes de ir a dormir.|