La Feria mantendrá diez días cargados de actividades culturales y literarias perfectas para redescubrir las obras de artistas autóctonos y reconocidos de Rosario, como la difunta escritora de ciencia ficción, Alejandra Gorodischer, quien tendrá su merecido homenaje. Cubiertos por 70 estands de diferentes editoriales que se hicieron presentes para ofrecer la mejor literatura nacional e internacional, que abarca todo tipo de géneros destinados a todas las edades.
Por su parte, la escritora de Catedrales y El Tiempo de las Moscas aprovechó su visita a Rosario para condenar la falta de acción de las autoridades contra los incendios que hasta hace apoco aquejaban las islas delta del río Paraná.
“Si el Delta del Paraná dejó de ser un ideal y se transformó en un paraíso perdido, hay responsables”, definió Piñeiro durante su discurso de apertura.
También, consideró que la Feria del Libro con la atención de cientos de rosarinos era el espacio adecuado para enunciar palabras como “ecocidio”, que permitan denunciar la problemática más reciente de la ciudad.
“Buscar palabras es la tarea de quienes escribimos. Palabras que nombren lo que hay que nombrar: Ecocidio, la destrucción de gran parte del medio ambiente, especialmente, si es intencionada e irreversible”, remató en el Centro Cultural Fontanarrosa.
Gran parte de su discurso fue un llamado de atención ante las problemáticas sociales que acontecieron en Argentina durante este año.
“¿No se trata de un tema lo suficientemente urgente para nosotros y nosotras, para los funcionarios de los distintos poderes ejecutivos, para los legisladores que tienen que sancionar leyes y a la justicia a la que le corresponde intervenir?”, se preguntó retóricamente Piñeiro.
Incluso aquellos que ojeaban libros con extrema curiosidad, pararon el oído para escuchar y aplaudir a la oradora que daba inicio a la primera jornada de un evento que continuará hasta el 18 de septiembre.
La feria de todas las edades
Uno de los focos dentro de la feria fue destinado al público infantil, según Marcelo Scalona, director de bibliotecas y ediciones de la Secretaría de Cultura de Rosario y encargado de la coordinación y dirección de la feria.
“Creamos en un apartado un espacio infantil específico donde los niños comienzan toda una práctica de lectura, escritura y juegos”, le dijo Scalona a Efe.
“Vivimos con una gran alegría y responsabilidad hace tres años que falta esta fiesta por la pandemia y Rosario, como gran parte de la humanidad, sufrió toda esa crisis”, agregó el coordinador y director de la feria.
El gran evento de las letras será el punto de encuentro para una programación muy nutrida, repleta de talleres literarios, charlas donde se abordarán las problemáticas sociales de la ciudad y homenajes a las grandes figuras locales.
“Este tipo de eventos implican un gran encuentro al aire libre en un lugar público para toda la población y con la cultura, la educación, el pensamiento y también el entretenimiento a tope”, aseguró Scalona.
Otra de las presentaciones más esperadas por el público es la novela Un crimen argentino del periodista rosarino Reynaldo Sietecase, que narra la historia de dos investigadores que son asignados para resolver el caso de una misteriosa desaparición de un hombre en plena dictadura militar.
La novela, no solo se ganó un sitio entre los más destacados del género policial argentino, sino que también fue llevada al cine este año.
En definitiva, la Feria del Libro de Rosario no tiene nada que envidiar a las demás, donde la búsqueda por generar mundos literarios propios y reconocidos es parte del decorado.
