Cannes es el escenario en el que las propuestas innovadoras que influyen en el cine del futuro, pero esto a veces juega en su contra, por el solo hecho de que hay grandes apuestas que rompen el esquema y son muy distintas a lo que se está acostumbrado a ver.
En Cannes no hay medias tintas. Cuando una película gusta, la ovación en pie y los vítores puede llegar a durar más de un cuarto de hora. En cambio, si el filme no hay caído con buen pie, pitos, abucheos, pataletas y hasta insultos. El festival más glamuroso del mundo, en esos momentos, no lo parece tanto.
Por la alfombra roja de la Croisette pasan las estrellas más importantes de Hollywood. Para muchos de los directores/as e intérpretes que pasan por allí, Cannes puede lanzar tu carrera en todo el mundo, convertirte en un cineasta de éxito o en el protagonista más codiciado... O puede hundir tu futuro. Tanto artísticamente como comercialmente. Muchas de las películas que son seleccionadas en el certamen no encontrarían distribución ni un resultado digno en taquilla si no fuera por el reconocimiento del festival y de la crítica mundial que allí se aglutina.
Por todo esto, los momentos en los que una "gran" película siembra las dudas en su presentación son recordados con malicia. Hay algunas que dividieron tanto a la crítica que incluso llegaron a ganar la Palma de Oro después de ser fuertemente abucheadas por un sector.
- Twin Peaks: Fuego, camina conmigo
La película es rara. A ratos puede parecer inconexa, y bebe mucho del universo de la segunda temporada de la serie, que claramente bajó el nivel respecto a la primera. Pero es David Lynch, La acogida de 'Fuego camina conmigo' fue una de las más infernales que se recuerdan en Cannes, aunque el festival quiso homenajear al artista invitándole a presentar la tardía tercera temporada de 'Twin Peaks' 25 años después. Eso ya fue otro cantar.
- Pulp Fiction
En sus primeras proyecciones en el festival, la que es para muchos la mejor película de Quentin Tarantino no recibió apenas ningún abucheo. Fue cuando se alzó con la Palma de Oro por delante de la francesa 'Tres Colores: Rojo' de Krzysztof Kieślowski cuando el ruido de lamentos y protestas se extendió por el Palais.
- Malditos Bastardos
Los primeros reportes de Cannes fueron muy, muy fríos. Si bien es cierto que Tarantino realizó el montaje a contrarreloj y que la versión final que se estrenó en salas (con tremendo éxito) fue algo distinta, su paso por Cannes no tuvo nada que ver con lo que significó la película después para la carrera y el prestigio del cineasta. En este caso, las prisas tuvieron la culpa.
- El árbol de la vida
Terrence Malick provocó una guerra de opiniones al terminar el primer pase de una película que terminó llevándose la Palma de Oro al finalizar el festival. Nunca se vio a la grada tan polarizada, con algunos aplaudiendo de pie y otros indignados abucheando a grito pelado. Al final, ganaron los primeros.
- Anticristo
La relación de Lars von Trier con Cannes ha sido siempre de amor-odio. Por eso disfrutó de lo lindo cuando 'Anticristo' comenzó a ser abucheada incluso durante la proyección, interrumpiendo la película, por un grupo de escandalizados.
- La Aventura
Aunque la película de Michelangelo Antonioni se terminó llevando una mención especial del jurado, director y actriz tuvieron que salir corriendo del primer pase ante la avalancha de improperios emitidos por el (nada) respetable público.
- Taxi Driver
Otra Palma de Oro que fue recibida con disparidad de opiniones tras su paso por la Croisette. Y, otra vez más, la culpable fue la violencia gráfica y el nihilismo que desprende la obra maestra (una de ellas) de Martin Scorsese y Robert de Niro.
- Corazón Salvaje
En 1990, todavía no entendían que una película de Lynch con Nicolas Cage iba a estar plagada de excesos o no iba a ser una película de Lynch y Cage. Bueno, al menos el pequeño grupo que mostró su sonora disconformidad, el resto de la audiencia y el jurado del festival la premiaron con el mayor galardón del certamen, la Palma de Oro.
- María Antonieta
El cruce de referencias culturales de Sofía Coppola chocó con el discurso rancio de cierto sector de la crítica cinematográfica y el escándalo estuvo al servido. Abucheos, críticas demoledoras y desprecio a la propuesta fueron las respuestas.|