Amigas en un camino de campo es una "pequeña fantasía sobre la amistad", un viaje poético de dos mujeres que hablan y recuerdan a una amiga muerta, mientras buscan un meteorito que ha caído cerca de sus casas, situadas en los hermosos paisajes de la puerta de la Patagonia.
Eva Bianco y Anabella Bacigalupo protagonizan una película que tuvo un rodaje "gozoso y extraño", explica a Efe su director, el argentino Santiago Loza, que la presenta en el Festival de San Sebastián (norte español), dentro de la sección Zabaltegui-Tabakalera, junto a las dos actrices.
La poesía de Roberta Iannamico está muy presente en la cinta, y de hecho es el tema sobre el que el director y guionista quería tratar de inicio, cerca del lugar donde la poeta reside, un paisaje campestre de gran "carga emocional", en un ambiente de crepúsculo otoñal que acompaña las conversaciones y silencios de las dos mujeres.
Decir sin decir
"Nosotras íbamos caminando con la cámara a lo lejos y sentíamos que nos atravesaba lo poético", dice Eva Bianco, premio a la mejor interpretación femenina de la sección Un certain regard del festival francés de Cannes por Los labios, codirigida por Loza e Iván Fund en 2010.
Es una idea que comparte con Anabella Bacigalupo (actriz de Muerte en Buenos Aires), para quien una de las características de la película es que "no aparece ese germen de lo humano de estar hablando, completando y diciendo, el decir aparece de otra forma, como a través del paisaje".
Según Bianco, "es muy hermoso como actriz dejarse fluir y atravesar por un personaje", y eso le ayudó también a "construir esos silencios", intercalados también con lecturas poéticas.
Sus conversaciones sobre una tercera amiga que ha muerto, la preocupación de una de ellas por su relación con la hija que ha ido a visitarla (interpretada por Jazmín Carballo), se manifiestan con las palabras justas, con un lenguaje sintético.
La caída del meteorito que salen a buscar por un camino en el que se encuentran con otros buscadores es un "pretexto para un viaje extraordinario", en el que también hay despedidas, promesas y se abre la posibilidad emocional de decir a otros que les van a echar de menos.
"Para mí éramos Eva y Anabella estando, dejándonos atravesar por el texto y la propuesta poética de Santiago. Era calmarse, estar y pasaba...", describe Bacigalupo sobre su actuación en un entorno de rodaje pequeño y experimental.
La parte femenina del director
El 80 % está rodado en exteriores, ya que se realizó "en un tiempo extraño", justo después de la pandemia de la covid, cuando había mucho miedo aún al contagio, y después de muchos meses de estar encerrados, dice el director, lo que transmite también un estado emocional de liberación y calma al espectador.
Para ese rodaje necesitó un equipo "cómplice" que también generó ese estado de gracia poética. Sobre los motivos por los que escribe y rueda con mujeres, asegura que se siente más cómodo cuando asume su parte femenina.
"Me pareció que aparecía de manera natural, además me convencen más las actrices que los actores", asegura. Adicionalmente, tanto Bianco como Bacigalupo son "dos amigas actrices", con las que Loza quería trabajar.
Loza (Córdoba, Argentina. 1971) es dramaturgo, cineasta y escritor y ha dirigido, entre otros, los largometrajes Grieta (2002), Ártico (2008), Extraño (2003), ganador del premio Tiger en Róterdam (Países Bajos), y La invención de la carne (2009).