Tal parece que el pasado del Príncipe Andrew con su amigo Epstein, continuará atormentándolo. Tras el fallo de la justicia de Nueva York, de desestimar la petición de resguardo del príncipe, se espera que vaya a juicio por la causa de abuso sexual interpuesta por Virginia Giuffre.
Sin vueltas ni preámbulos, su madre, la Reina Isabel II mantuvo una acalorada charla con el menor de sus hijos varones, donde resaltó el estatus de la realeza, la importancia de cuidar las apariencias y de alejarse de los escándalos por el bien del reinado británico.
Durante 90 minutos, la consorte mantuvo a raya su decisión influenciada por el Príncipe de Gales, Carlos y el Duque de Cambridge, William, quienes sugirieron proteger la Corona por sobre todas las cosas. El duque se reunió con su madre, antes del anuncio del Palacio de Buckingham. Según los informes, Andrew fue conducido desde su casa cercana, Royal Lodge en Windsor Great Park, por uno de sus abogados, Gary Bloxsome, quien se dice que esperó en el automóvil durante la charla.
Según los informes, una 'fuente principal del Palacio' dijo que la acción fue '”una decisión despiadada y rápida”, recomendada por el Príncipe de Gales y el Duque de Cambridge y sancionada por la Reina: “Se trata de la supervivencia de la institución a toda costa. Siempre lo ha sido y siempre lo será”.
Siguiendo esos lineamientos el Palacio de Buckingham anunció anoche que el Duque de York sería despojado de sus afiliaciones militares y patrocinios reales, y que se defendería ante este caso, “como un ciudadano privado".
Sin objeciones, el príncipe Andrew, seguirá sin asumir ningún cargo público y defenderá este caso como un ciudadano privado. Se ha informado que también dejará de usar su estilo HRH, consolidando efectivamente la disolución de su rol real oficial.
La demanda:
Virginia Giuffre, de soltera Roberts, presentó una demanda civil contra el duque en los EE. UU. el verano pasado, alegando que ella abusó sexualmente de él mientras era traficada cuando era adolescente por el difunto Jeffrey Epstein, un ex amigo de Andrew y un pedófilo convicto. Los presuntos incidentes tuvieron lugar cuando Giuffre tenía 17 años, aún menor de edad según la ley de Nueva York, lo que significa que presentó una demanda contra la realeza en virtud de la Ley de Víctimas Infantiles. Andrew ha negado todas sus acusaciones contra él, afirmando previamente que no recuerda haber conocido a Giuffre.
Los abogados del duque recientemente intentaron que se desestimara el caso sobre la base de un acuerdo de 2009 entre Giuffre y Epstein, pero el juez de distrito de Nueva York, el juez Lewis A. Kaplan, dictaminó que su reclamo debe ser escuchado, lo que significa que ahora irá a juicio.
Virginia Giuffre elogió la decisión del juez en Twitter esta semana y escribió: "Estoy satisfecha con el fallo del juez Kaplan que permite que mi caso contra el príncipe Andrew siga adelante. Me alegro de tener la oportunidad de seguir exponiendo la verdad y estoy profundamente agradecido a mi extraordinario equipo legal... Mi objetivo siempre ha sido demostrar que los ricos y poderosos no están por encima de la ley y deben rendir cuentas'.|