Desde el “cuartito” hasta el café con aspirinas: las crueles verdades del maltrato en Cebollitas – Negocios & Política
 

Una por una las declaraciones |Desde el “cuartito” hasta el café con aspirinas: las crueles verdades del maltrato en Cebollitas

De la acusación letal de Juan Yacuzzi a la carta abierta de Pedro Castagna. La realidad que la tira infantil ocultó durante mucho tiempo y que luego de 25 años salió a la luz de boca de sus protagonistas.
Celeste Cappello
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“Se escuchaban unos gritos, unas cagadas a pedos terribles, innecesariamente o cuando nos tentábamos, que éramos chicos, nos cagaban a pedos como si hubiéramos matado a alguien; si hoy grabáramos ese griterío con un celular, hay varios que no trabajarían más”, así lanzaba la bomba meses atrás, el actor, Juan Yacuzzi quién encarnó a Coqui en la popular tira juvenil mientras recordaba algunos malos momentos que pasó durante las grabaciones.

Si hay un programa juvenil de la década del ‘90 que hizo historia fue Cebollitas. La tira fue uno de los tantos semilleros de figuras que hoy son de primer nivel, como lo fue Montaña Rusa, Amigovios, y Chiquititas. La serie de televisión abierta argentina infantil trataba sobre un grupo de chicos que jugaban al fútbol. Fue emitida desde el 1° de enero de 1997 hasta el 2 de octubre de 1998 de lunes a viernes entre las 17 y las 18, con un total de 458 capítulos, de una hora cada uno. Dirigida por Víctor Stella y "El Mono" Flores, entre otros se destacaron allí: Carmen Barbieri, Gino Renni, Mercedes Funes, Dalma Maradona, Juan Yacuzzi y Diego Vicos.

Sin embargo, para Yacuzzi fue algo devastador, inclusive reveló que tras hacer público ese tema, recibió llamados intimidatorios y amenazas por parte de quienes fueran productores de la exitosa ficción de los '90. “Siguen en la misma postura y piensan que tienen más poder que nosotros o al menos en lo personal siguen con eso de aprovecharse. ´No pibito, no quiero hablar más con vos, qué decís que Cebollitas, no quiero hablar más con vos ' ¡Qué pibito si tengo 40 años!”, resaltó.

 “Algunos se volvían muy locos, se ponían rojos de gritarnos, tiraban el papel en el piso, algunos lloraban y todo. Pensábamos que era algo normal, que te equivocadas con la letra y que te griten y te caguen a pedos. Si te equivocabas te pasaban la escena, y te decían ‘ahora por tentarse queda para lo último’ y por ahí tenías que esperar seis horas para grabar esa escena donde te equivocaste y éramos chiquitos”, siguió el actor.

“A los grandes los trataban de otra manera, había una diferencia abismal porque nosotros grabábamos veinte escenas por día, nos equivocábamos en algo y nos gritaban de una manera terrible y nos trataban para el cacheteo, te lo puedo decir porque yo lo viví”, sumó Yacuzzi, en una nota en Mañanísima. Luego, cerró: “Los de Chiquititas parecían un regimiento. Uno tras otro con su uniforme. Era tremendo. Si a nosotros nos tenían así, no me quiero imaginar cómo los tenían a ellos. Había tensión”.

Juan fue el primero de los actores que apuntó contra la producción de la mencionada tira infantil. Tras su testimonio, otros tantos salieron a respaldar sus dichos y contar sus propias experiencias. Mientras que Martín Miani (Tomás) e Iván Rossi (El Tanguerito) contaron que sufrieron distintos tipos de maltratos durante las grabaciones de Cebollitas, se sumó el relato de Mariana Rubio.

La actriz, que interpretó el papel de Roxana en la tira, contó el calvario que sufrió durante las grabaciones: Decidí hablar ahora porque cuando todo explotó estaba en el último mes de embarazo y fui mamá hace dos meses, tuve la última parte del embarazo complicada y sumado a todo lo que estaba pasando con Cebollitas tuve problemas de presión y preferí guardarme pero siempre apoyé a los chicos que denunciaron”, comenzó diciendo.

"Yo quiero aclarar que puntualmente no sufrí nada en particular hacia mi persona pero si estuve en muchas situaciones de abuso, hubo un abuso y acoso psicológico. Vi chicos llorando, escuché gritos y maltratos y un montón de situaciones, comparaciones entre diferentes actores. Nosotros lo naturalizamos porque en esa época no pensaba que la vida no era así, no debería ser así y cuando pasaba decíamos ´uh lo cagaron a pedos´”, recalcó.

"Hubo muchas situaciones que nos denigraron tanto a nivel psicológico y hubo mucha gente que no volvió a hacer más nada en la tele. Yo vi a una mujer que trabajaba ahí diciéndole a un nene que no servía para esto y que se dedique a otra cosa. Nos cagaban a pedos mal. 'Es difícil laburar con chicos' pueden decir pero de ahí al maltrato, no está bueno”, agregó.

Carmen Barbieri, una de las adultas protagonistas de la tira infantojuvenil de Telefé, no solo defendió a los directores de la ficción sino que también aseguró que Juan mentía. "Vine a legitimar lo que dijo Juan. Yo no vivo de los medios, no me interesan los medios ni vivo de eso. No me gustó como se trató el tema. A Carmen la admiro, tengo un gran recuerdo de ella, quizás personalizó el tema y no tenía nada que ver con ella. No dio margen de dudas de lo que dijo Juan, ni siquiera por un tema de empatía...", destacó Martín Miani, otro de los protagonistas.

Y por último contó la fórmula que tenían los productores de la ficción para mantener a los jóvenes actores funcionales para mantenerse activos en las largas horas de grabaciones: "Cuando nos tocó hacer temporada en el teatro, si bien se habían adelantado capítulos, se seguía grabando. En vacaciones de invierno creo que trabajábamos todo el día. En ese caso se nos mezclaba café con aspirina para aguantar hasta el final de la jornada".

Iván Rossi, que interpretó a Emiliano El Tanguerito en la ficción, contó una fuerte situación que vivió cuando tenía apenas 8 años y era parte del elenco: "Se habla de los gritos también. Yo he visto compañeros llorando sin tener idea que estaba pasando. A mí me pasó algo muy puntual. Había una escena que una de las actrices grandes se convertía en una bruja. Yo, con 8 años, no pude establecer diferencias y me pegué el julepe de mi vida. El susto fue real y me dio taquicardias y todo eso".

"La actriz se dio cuenta que yo estaba mal porque lo estaba viviendo como algo real. La actriz cortó la escena y dijo 'chicos paren, el nene está mal'. Yo no podía parar de llorar. Llamaron a mi vieja y todo. Esa escena querían sacarla al aire, y el sufrimiento mío era real. Mi madre dijo que no y al final esa escena no salió".

"¡Yo nunca viví un maltrato! De hecho los maltratos que vi en esa época eran más de algunos padres a sus hijos que de otras personas", sorprendió Dalma Maradona, Sin embargo, reconoció que "sí había una dinámica de grabaciones que hoy no están permitidas. Pero hablo específicamente de horarios", aclaró, como para que no quedaran dudas que sería lo único que en la actualidad no podría hacerse.

El tema de la jornada laboral para un menor también estaba. Nosotros grabábamos once horas a veces y la ley creo que habla de seis horas. Nosotros nos divertíamos y no lo juzgábamos".

"Nos escondían detrás de los decorados por el tema de las horas extras para que no nos vean los de la Asociación de Actores​ cuando venían a controlar que se cumpliera el horario para los chicos. No veíamos mal esas cosas. Nos parecía normal. Mis viejos no se enteraban lo que pasaba porque nosotros no se lo contábamos porque no lo vivíamos como algo malo", se sinceró.

Brian Caruzo, Gamuza en Cebollitas, rompió el silencio y desmintió las palabras que el intérprete de Coqui emitió en varias apariciones mediáticas: “la realidad es que nos tenían en un cuartito, que era donde comúnmente íbamos todos para pasar el tiempo cuando no tenías que grabar; si no, te ibas al bar, pero no es que nos maltrataban, como dice (Yacuzzi), no es que nos maltrataban completamente, que nos puteaban”.

“Era un cuartito que teníamos para estar ahí, hacer la tarea o lo que quisieras ahí, si no te ibas al bar. Te buscaban en el corralito o en el bar, y había alguien que nos cuidaba. Yo hice giras y todo y jamás sentí que nos faltaran el respeto, que nos maltrataran, jamás”, subrayó.

Al ser tantos, pasa que muchos se dispersan, pero no al punto de que nos gritaran, no es tan así. Nosotros, que éramos más chicos, teníamos exigencias, aprendíamos la letra, nos portábamos bien, a algunos les costaba más que a otros, pero no es tan tan así como dice Juan. Trabajar con muchos chicos se puede complicar, pero no es que nos retaban o gritaban”, sumó y cerró: “Cuando las escenas se repetían genera, entre comillas, pérdida de tiempo, pero no sentí que nos retaran ni gritaran por eso. A veces se enojaban cuando las escenas se repetían muchas veces, yo no repetía muchas”, cerró.

El actor Matías Boquete, quien interpretó a Axel, coincidió con ellos: “todos tuvimos vivencias diferentes. Si bien tuvimos experiencias en grupo, probablemente hayamos vivido cosas diferentes. En mi caso, yo un día terminé de hacer una de las escenas y una de las actrices me dio vuelta la cara de un bife”.

“Era un adolescente, podría ser otro de los chicos, pero fue un adulto... Yo en ese momento me mordí la boca con un montón de rabia porque estaba trabajando. Ni en mi casa me levantaban la mano mis papás y dije ‘¿qué está pasando?”, añadió.

“La verdad es que se me llenaron los ojos de lágrimas, mordí las muelas y tragué. Me fui indignado porque había sido una falta de respeto”, amplió, aunque no quiso dar el nombre de su colega. Y explicó: “A ella le molestaba que yo le moviera la silla y que estábamos trabajando. Y me pegó, ¡una locura!”.

La carta abierta de “Brian”

Pedro Castagna, quien encarnó el personaje de "Brian" en "Cebollitas", aportó nuevos datos sobre lo que ocurría en las grabaciones de la exitosa tira de los '90. A través de una carta abierta, el ex integrante de la tira, aseguró que: “En ese momento lamentablemente era normal, que productores, asistentes se manejen de una manera errónea con niños. Los gritos y los malos tratos eran frecuentes, la famosa Pecera que hablaron los chicos era así tal cual te lo describieron, dónde teníamos que esperar horas y horas antes de grabar”.

“Convengamos que esto paso hace más de 20 años, era otro contexto de país, otras culturas” dijo en el escrito que leyó Juan Etchegoyen. “También depende de la personalidad de cada uno, y como uno lo sintió, a mí en particular no me genero ningún trauma ni nada, yo lo tomaba como un juego, pero entiendo y respeto si alguno de mis compañeros se sintieron mal”, agregó.

Siguiendo con su relato, Castagna señaló que: “Soy papá de dos nenas, que si hoy me preguntas si las dejaría trabajar en la tele con el contexto de esa época te digo NO, pero gracias a dios evolucionamos como sociedad y como lo tengo entendido no sucede más...!!!”, dijo al respecto.

“La verdad que en ese momento lamentablemente era normal que pasen. Veo que muchos dicen y los papas donde estaban??? por suerte los papas siempre estuvieron presentes, el tema es que lo tomábamos con total naturalidad todo lo que paso y muchos ni se los contábamos ya pensábamos que eran las reglas del juego y que era normal.

Entiendo, respeto y acompaño a cada uno de mis compañeros q la pasaron mal. Te mando un fuerte abrazo Juan querido”, cerró.  |

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