Rusia espera exportar en el año agrícola 2023-2024 entre 50 y 55 millones de toneladas de grano, pronosticó hoy el ministro de Agricultura ruso, Dmitri Pátrushev, en una reunión del Gobierno ruso encabezada por el presidente, Vladímir Putin.
"En base al volumen de producción de 2023 y tomando en cuenta los remanentes anteriores, esperamos exportar en la nueva temporada entre 50 y 55 millones de toneladas de grano", indicó durante un encuentro telemático transmitido en directo por la televisión pública.
Respecto a la temporada agrícola que concluirá en julio de este año, Pátrushev precisó que 45 millones de toneladas serán de trigo.
El ministro de Agricultura mantuvo los pronósticos anteriores sobre producción de la venidera temporada, que estimó en 123 millones de toneladas la producción de grano en 2023-2024, de las cuales, 78 millones de toneladas serán de trigo.
Por su parte, el presidente ruso afirmó que las exportaciones podrían ascender incluso a los 60 millones de toneladas.
Sin embargo, alertó que es preciso "tomar en cuenta que se observa una oferta bastante alta de grano en el mercado mundial, lo cual ejerce una presión considerable sobre los precios e influye en los planes futuros de nuestros productores agrícolas".
"Esto es algo que debemos tomar en consideración, para excluir en un futuro la reducción de la superficie de cultivo de grano en el país", dijo.
Añadió que, "pese a los obstáculos impuestos a nuestro comercio exterior" por medio de las sanciones de Occidente, "Rusia logró incrementar las exportaciones de producciones agropecuarias a los 41.600 millones de dólares", un crecimiento que calificó de "considerable".
"Sería magnífico que alcanzáramos los mismos resultados que el año pasado. Pero, en cualquier caso, la cosecha debe ser digna", aseguró y llamó a "no relajarse bajo ningún concepto".