El presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva afirmó este martes que el Mercosur quiere, a partir de un acuerdo comercial con la Unión Europea (UE), tener "más aliados" y no las "imposiciones" que el bloque europeo plantea.
El mandatario, que se encuentra en la ciudad argentina de Puerto Iguazú para participar y asumir la presidencia pro tempore del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) cuestionó la "carta imponiendo algunas condiciones" remitida en marzo por la UE.
"La carta es inaceptable tal como fue escrita. No aceptamos y estamos preparando otra propuesta" para llevar a Bruselas, que el 17 y 18 de julio acogerá el encuentro de la UE con la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac), manifestó Lula.
Los presidentes de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay deben acordar una posición común para seguir adelante con las negociaciones con la UE para finalizar el tratado de libre comercio y se espera que elaboren una contrapropuesta a la lista de demandas.
El escenario es complejo ya que, tras dos décadas de arduas conversaciones, en 2019 la UE y el Mercosur alcanzaron un acuerdo político general para sellar el pacto, dejando pendiente la resolución de algunos aspectos técnicos.
Pero esa discusión se complicó por la aparición de nuevas demandas a ambos lados de la mesa, en particular las relativas a cuestiones medioambientales.
"Lo que queremos es consolidar un acuerdo" con una "política de 'gana-gana'", apuntó Lula, quien, en ese sentido, criticó puntos sensibles del pedido europeo, como el del acceso a las compras gubernamentales.
Cediendo en las compras gubernamentales, opinó Lula,"sería matar las pequeñas empresas y a los emprendedores". De igual manera, el gobernante abordó el tema ambiental y las condiciones expuestas sobre el asunto por parte de la UE.
"Nadie en el mundo tiene autoridad moral para cuestionar a Brasil sobre energía limpia. Tenemos una matriz energética con el 87 % de energía limpia" y "Brasil tiene autoridad moral para cuidar el planeta", expresó.
En ese sentido, Lula recordó que su Gobierno asumió "el compromiso para una deforestación cero en 2030" y aludió que "los países ricos no cumplen tampoco los acuerdos".
"Estaremos esta semana en Leticia, Colombia, con científicos para discutir sobre la selva y en agosto en la Cumbre de Países Amazónicos, porque ya se acabó ese Gobierno que no respetaba el medio ambiente y los indígenas", resaltó.
Con todo, tanto desde Bruselas como desde el Mercosur alientan la posibilidad de alcanzar un acuerdo antes de finales de año. "El Mercosur es importante. Vamos a fortalecerlo y quiero realizar una presidencia ejemplar para dedicarme y esperar concluir al final de este año ese acuerdo", concluyó el presidente brasileño.