En conferencia de prensa en la sede de Azopardo, tras el encuentro del Consejo, Héctor Daer, uno de los secretarios generales de la CGT sostuvo que la protesta será contra los especuladores que suben los precios, pero también buscará llamar la atención de los políticos, al considerar que todos deben hallar una solución. Por esa razón, el 17 de agosto próximo marcharán desde el Obelisco hasta el Congreso de la Nación, como ya lo habían anticipado días atrás.
Con ambigüedad, el referente del gremio de Sanidad, sostuvo que la marcha será "ni a favor ni en contra del Gobierno". A su entender, "este proceso inflacionario erosiona todas las variables macroeconómicas y los salarios".
"La CGT cree que la decisión de encontrar un camino común que permita salir de esta coyuntura de crisis la tiene la política toda", consideró el referente sindical, que también afirmó que la situación de crisis "tiene origen fundamentalmente en el endeudamiento que se generó en el gobierno anterior, tanto en los sectores de bonos privados como el FMI, que secaron las arcas de divisas".
En este marco, Daer señaló que la marcha que organiza la CGT "procura interpelar a la política en su conjunto, desde el Obelisco, al monumento a la política, que es el Congreso". A lo que agregó: "Bajo ningún punto de vista podemos permitir que haya especulaciones políticas. El Gobierno fue electo democráticamente y no puede ser atacado con especulaciones políticas de 2023 ni con especulaciones económicas".
Actualmente, existe cierta distancia entre el Gobierno y la dirigencia sindical, que en un momento se autodefinió como el principal sostén del presidente Alberto Fernández en su pelea interna contra el kirchnerismo, pero que ahora toma prudencial distancia por la situación económica.|