El caso de Lola generó una fuerte repercusión social y obtuvo una extensa cobertura mediática tanto en Argentina como en Uruguay. Una joven de 17 años que había viajado a la casa de su madrina, nunca pensó encontrarse con un final como ese.
Lola Chomnalez tenía 14 años y era la primera vez que salía del país. Lola Luna, como la conocían sus amigos, asistía al segundo año del Liceo N° 9 del barrio porteño de Belgrano y tenía planeado volar a Nueva York para festejar sus 15.
Fines de 2014, Lola fue hallada muerta en Barra de Valizas, tres días después de su llegada al balneario uruguayo para pasar unos días con su madrina, Claudia Fernández, quien se encontraba junto a su esposo, Hernán Tuzinkevcih, y el hijo de éste. Pero su viaje terminó el 28 de diciembre cuando salió a caminar por la playa y terminó arrojada a los médanos.
A raíz del asesinato, sus padres hicieron todo lo posible para que la causa no quede estancada, incluso llevaron a Uruguay una carta escrita por Mauricio Macri en 2018, quién ejercía como presidente de la Argentina.
Muerta por asfixia y por cortes de arma blanca, decía la autopsia. Según las reconstrucciones, Lola había intentado escapar pero fue alcanzada y golpeada en la cabeza. Ariel Moreira, apodado "El Cachila", fue inicialmente detenido como supuesto autor del ataque aunque luego fue desestimado por ese delito porque su ADN no coincidía con el hallado en los elementos de la víctima.
Era un artesano y cuidacoches que reconoció haber estado con la víctima el día del homicidio. En su declaración admitió que se cruzó con la víctima en la playa el 28 de diciembre del 2014 y le ofreció "una estampita", pero que luego ella se sintió "mareada" y que al auxiliarla descubrió que "no tenía pulso", se asustó y se fue.
"El Cachila" estuvo presente "antes, durante y después" del homicidio, cuyo móvil fue probablemente "sexual", dijo el fiscal. Entre las pruebas valoradas para su procesamiento estuvieron los resultados de peritajes psicológicos, psiquiátricos y semiológicos que revelaron que el acusado tiene una personalidad con tendencia "a la mitomanía", a "irritarse fácilmente y perder el control de sus impulsos", y un patrón de "desprecio y violación de los derechos de los demás".
El presunto autor:
Pero a siete años del crimen, la policía uruguaya efectuó una segunda detención por el femicidio de Lola. Un hombre de 39 años que fue ubicado en Rocha, Uruguay, como presunto autor material del crimen, tras coincidir su ADN con las pruebas halladas en la víctima.
El arresto fue confirmado por el director de Comunicación del Ministerio Público de Uruguay, Javier Benech, y por los abogados de los padres de la joven, Juan Williman y Jorge Barrera, quienes confirmaron que en el expediente consta un ADN positivo que incrimina en el caso al hombre detenido ayer.
Por su parte, Benech informó que el detenido sería trasladado al Departamento Judicial de Rocha para prestar declaración indagatoria ante la fiscal del caso, Jéssica Pereira, y el juez de Primera Instancia de esa jurisdicción, Juan Manuel Jiménez Vera.
Fuentes judiciales detallaron que el sospechoso fue detenido en el Chuy, en el límite con Brasil, y en el expediente consta que distintos testigos refirieron que era frecuente verlo en la zona de Castillos y Rocha .El hombre, cuya identidad no fue dada a conocer, tiene antecedentes penales por otros hechos, por lo que su ADN formaba parte del banco genético de procesados penalmente, lo que permitió realizar un cotejo -que tuvo resultado positivo- con el material biológico hallado en una cédula y la mochila de la víctima.|