Datos provistos por los poderes judiciales y ministerios públicos fiscales de todo el país, muestran que en el caso de los crímenes con más de una víctima la proporción escala hasta el 37 %. En el 91 % de los asesinatos cometidos con armas de fuego ambas partes tenían un vínculo previo: en el 66 % eran o habían sido pareja o expareja; en el 15% eran familiares y en el 10% restante estaban vinculados de alguna otra forma.
Por otra parte, el registro señala que en un tercio de los casos referidos había antecedentes de violencia de género, y en 31 de ellos las víctimas habían presentado una denuncia formal contra sus agresores. Además, dos de cada tres de estos feminicidios ocurrieron dentro de una vivienda, principalmente en la residencia de la víctima. Respecto a los casos de feminicidios múltiples, el informe muestra que en aquellos cometidos con algún arma de fuego existe casi el doble de posibilidades de que más mujeres acabaran siendo asesinadas.
De estos crímenes cometidos con armas de fuego, el 40 % tuvo lugar en la provincia de Buenos Aires. El registro señala también que en al menos el 17% de los casos el feminicida pertenecía a algún cuerpo de seguridad, y que el 18% de los autores se suicidó tras cometer el crimen.
Desde hace ocho años la OM aporta datos sobre feminicidios en el ámbito nacional con la intención de que el Estado pueda trabajar en políticas preventivas y de capacitación. Según la Corte Suprema de Justicia, la información recogida en este estudio permite colaborar con organismos internacionales y nacionales para promover la adopción de mecanismos de medición, prevención e investigación de feminicidios en el ámbito regional e internacional. En Argentina, en 2021 se cometieron 305 feminicidios, cifra que según el Observatorio de Femicidios Adriana Marisel Zambrano da una media de un asesinato cada 29 horas.|