Los activistas de la organización Avaaz pidieron en Washington al Fondo Monetario Internacional (FMI) que tenga en cuenta las riquezas naturales de Argentina y la considere una "acreedora ambiental".

"Argentina posee un importante superávit ecológico y recursos naturales que le proveen servicios ecosistémicos vitales y de gran valor que podrían valer mucho más que su deuda soberana y que no está siendo reconocida por los acreedores financieros”, afirmó Oscar Soria, director de campañas de Avaaz, según informó esta organización en un comunicado.

Soria dijo que "la no incorporación de la naturaleza y su biodiversidad en la contabilidad de los acuerdos del FMI tiene como consecuencias la reducción de los presupuestos para la protección del ambiente y la proliferación de nuevos proyectos de intensificación productiva en detrimento de la naturaleza y su biodiversidad”.

Al mismo tiempo, añadió, “la clase política argentina parece no tomar en serio a la ciencia ni a los últimos paradigmas económicos, que resaltan la urgencia de proteger los recursos naturales”.

Las juntas de gobernadores del FMI y del Banco Mundial realizan del 18 al 24 de abril en Washington sus sesiones de primavera a las cuales asistirán autoridades de bancos centrales, ministros de finanzas y ejecutivos del sector privado.

A mediados del mes pasado, Argentina concluyó con el FMI un acuerdo por 45.000 millones de dólares para reestructurar un programa contingente recibido en 2018.

En su comunicado, Avaaz señaló que Argentina tiene un índice de pobreza que supera al 40 % de su población y un endeudamiento crónico calificado por el propio FMI como "insostenible", pero tiene una "huella ecológica positiva".

Ese saldo positivo responde a que la "biocapacidad de Argentina excede su propio consumo de recursos naturales, satisfaciendo su propia demanda y proveyendo servicios y bienes ecosistémicos a los países en déficit", añadió Avaaz, quien por eso pidió que se considere a este país "acreedor" en materia de medioambiente.|