El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, se dirigió a la población en un nuevo video, en el que afirmó que las tropas de la Federación Rusa ya habían llegado a la capital.
"Las fuerzas de sabotaje enemigas entraron en Kiev. Le ruego a la gente que tenga cuidado, que se adhiera a las reglas del toque de queda. Permanezco en la sede del gobierno junto con todos los que se necesitan para el trabajo del gobierno central", dijo el mandatario.
Según el ex comediante, él y su familia -que no abandonaron el país- son el objetivo principal del Ejército de Vladimir Putin.
"Me quedo en la capital, mi familia también está en Ucrania, mis hijos también están en Ucrania. Mi familia no son traidores, sino ciudadanos de Ucrania. Pero dónde están ahora, no tengo derecho a decirlo", sostuvo en su mensaje.
"Según la información de que disponemos, el enemigo me ha designado como objetivo número uno, mi familia como objetivo número dos. Quieren destruir Ucrania políticamente destruyendo al jefe de Estado”, denunció.
Asimismo, Zelensky señaló que, a pesar del apoyo hacia su gobierno que los países expresaron de forma casi unánime, "los ucranianos tendrán que defender su Estado por su cuenta".
"Nos quedamos solos para defender el Estado. ¿Quién está listo para pelear con nosotros? Honestamente, no los veo. ¿Quién está dispuesto a dar a Ucrania una garantía de unirse a la OTAN? Honestamente, ¡todos tienen miedo!", fustigó, en tono desesperado.
"Les digo a todos los socios de nuestro Estado: ahora es un momento importante, se está decidiendo el destino de nuestro país. Les pregunto: ¿estás con nosotros? Responden que están con nosotros, pero no están listos para llevarnos con ellos a la alianza. Hoy pregunté a 27 líderes europeos si Ucrania se uniría a la OTAN, pregunté directamente. Todo el mundo tiene miedo. No contestan", reveló.
En el audiovisual, difundido a través de su canal de Telegram, el presidente ucraniano también resumió los resultados del primer día de combates, en el que, según él, las Fuerzas Armadas de Ucrania perdieron 137 defensores, incluidos diez oficiales, mientras que otros 316 soldados ucranianos resultaron heridos.
En la Isla de las Serpientes, ubicada en el Mar Negro, 13 soldados ucranianos "murieron heroicamente" defendiendo su posición hasta el final.
Por parte de Rusia, las fuentes oficiales de Ucrania hablan de 800 muertos, dato no confirmado por el bando de Vladimir Putin, que asegura que sólo ataca instalaciones militares y acusa a su vecino de difundir imágenes falsas para confundir a la población civil.
En las últimas horas, numerosos ciudadanos rusos se volcaron a las calles de San Petersburgo y Moscú para mostrar su descontento con las acciones bélicas que lleva adelante el Ejecutivo en contra de quienes consideran parte de su propio pueblo.
Segundo día en llamas
Mientras siguen llegando declaraciones de condena a la iniciativa de Putin, Kiev está sitiada por los militares rusos.
Casi en paralelo al anuncio del presidente estadounidense, Joe Biden, de nuevas sanciones contra Moscú, así como de la no intervención de la OTAN, las explosiones sacudieron la capital ucraniana.
De esta forma, la "operación militar especial" lanzada por el Kremlin, que comenzó la noche del jueves, continúa y se intensifica.
En las últimas horas, el objetivo de los militares fue impactar en la capital Kiev, donde entraron en acción las sirenas antimisiles .
De su lado, los rusos -que hablan de "éxito" luego del primer día de operaciones- controlan un aeropuerto en la capital, el Hostomel, donde se realiza el desembarco de helicópteros de las tropas aerotransportadas.
Por tierra, las columnas militares ya llegaron a las afueras de la capital, provenientes de Chernóbil, la ciudad fantasma de la que tomaron posesión durante la jornada de ayer.
El segundo día de combate se inició en la madrugada con al menos dos fuertes explosiones en el centro de Kiev, con edificios civiles afectados y, al promediar la mañana, se registraban disparos y explosiones en barrios de la ciudad, mientras tropas ucranianas informaron que se enfrentaban con blindados rusos en las localidades de Dymer e Ivanik, a 45 y 80 kilómetros, respectivamente, al norte de la capital.
Además, se registran combates en Mariupol, y en toda la región separatista del Donbass, al oeste del país, mientras que en Odessa los rusos ya controlan el aeropuerto. La defensa aérea de Ucrania parece estar comprometida, al igual que las fuerzas aéreas del país, el principal objetivo de la "desmilitarización y desnazificación" anunciadas por Putin. |