¿Censura? Naa imposible, era una etapa marcada por exceso de libertad de expresión, defendían los allegados al gobierno kirchnerista. Pero las pruebas estaban sobre la mesa y en 2012, un reconocido periodista de C5N, Marcelo Longobardi, era sacado de aire mientras entrevistaba a Alberto Fernández, quién ese momento era ex Jefe de Gabinete y le encantaba criticarla.

Pero esto solo fue una muestra del “exceso de formalismo” que decidió excusar el empresario Daniel Hadad tras el corte de emisión, alegando que tanto el entrevistado como el entrevistador, se habían pasado del tiempo estipulado.  

El corte en la emisión del ciclo "Longobardi en vivo" ocurrió apenas pasadas las 23, mientras el conductor realizaba una pregunta al ex funcionario. Ni un adiós, ni unas gracias, ni nada. Ambos fueron censurados de forma abrupta mientras quedaban con muchas palabras por decir. Atrás habían quedado las críticas a las medidas económicas, al conflicto surgido por el traspaso de los subtes y al rol del secretario de Comercio Interior de aquel momento, Guillermo Moreno.

"En la producción estaban apenados, confundidos, enojados, desencajados", espetó un periodista mexicano que quedo en ascuas luego de que terminara el ciclo y no lo entrevistaran a él: “fui testigo de la censura, me parece que desde cualquier punto de vista la decisión y la acción de sacar este programa del aire fue un error total”, dijo el presentador de CNN en español, Alberto Padilla.

Pero órdenes de arriba, son órdenes de arriba y "la dirección del canal, acató las dadas por llamados de funcionarios del Gobierno". "El responsable de todo esto soy yo. Asumo mi exceso de formalismo", bien lo admitió el dueño de la señal, Daniel Hadad.

21 años no son nada:

Tras aquel icónico momento, el periodista Marcelo Longobardi dejó de conducir su clásico programa matinal en Radio Mitre, luego de presentar su renuncia ante las autoridades de la radio el pasado 26 de octubre.

Pulcro, de una corrección sin mácula, reñido para siempre con la menor estridencia, cautivaba a sus oyentes todas las mañanas con su voz de traje impecable. Considerado el más gráfico de los periodistas radiales, “le hacía el amor a los matutinos”: los recortaba, los subrayaba, les escribía encima y los clasificaba mientras iba de su casa en Nordelta a la radio, siempre devoto a los diarios de papel.

De vida metódica, detesta ser el entrevistado pero disfruta siendo quien destroce las mieles de las celebridades. De contenido y formalidad, a sus 60 años agradece no haber terminado el secundario –dejó en tercer año cuando sólo tenía 15, algo que ocultó por vergüenza durante mucho tiempo– porque la vida le dio las experiencias y saberes que necesitaba para destacarse.

En una de las pocas entrevistas que brindó en el pasado, se caracterizó por ser serio, bastante fóbico, quién rara vez toma un trago, pero se fuma un paquete de cigarrillos por día y que su mayor exceso es jugar al golf. Suele poner su cabeza en la almohada cuando en muchas casas todavía ni se han sentado a cenar. Ese perfil atildado, cautivó durante 21 años a más de la mitad de la gente que sintoniza alguna emisora entre las 6 y las 10.

En rasgos generales, desde 2002 hasta fines de 2012, trabajó en Radio 10, conduciendo Cada mañana, junto a María Isabel Sánchez, el humorista Rolo Villar y el Doctor Alberto Cormillot, donde lideró la audiencia de la primera mañana, el horario más competitivo. ​Condujo junto a Alfredo Leuco el programa periodístico Fuego Cruzado por el canal América TV hasta 2006. En C5N condujo el programa "Longobardi en vivo".

Desde marzo de 2013, condujo Cada mañana, por Radio Mitre.9​ De 6 a 10 hs., e incluso derrotó a Samuel «Chiche» Gelblung por 32 % a 29,8 %, y le dio una histórica victoria a Mitre en un horario que durante 14 años había sido de Radio 10.

Pero hoy dice basta. "He disfrutado mucho y he sido muy feliz, pero 21 años son suficientes", fue la gran despedida de quien es su pasado sufría ataques de pánico cuando tenía discrepancias entre lo que quería y lo que hacía.  Logística, talento, disciplina y trabajo fueron los pilares que lo llevaron por diferentes caminos en su carrera y que lograron sostenerlo.

"Uno no puede creerse que el éxito es de uno. No es algo eterno, pero es algo peligroso, y manejarlo es difícil", continuó con su discurso de despedida. Sin embargo, el trasfondo parece ser otro y más grande como para abandonar la radio del Grupo Clarín después de más de dos décadas al frente del programa más escuchado de la radio.

Según contaron en entrevistas a medios, la tensión entre el periodista y el gerente de programación de Mitre, Jorge Porta, fue uno de los motivos de su anuncio. En agosto, el conductor de “Cada Mañana” había mantenido un cruce con Jorge Lanata por el pase entre programas. Allí Lanata le había recriminado que le consumía parte de su franja horaria, lo que originó varios minutos de silencio al aire en protesta contra aquel episodio. Sin embargo, en su despedida les brindó su agradecimiento.

Argumentando que el programa fue el primero en números y también pionero en ganar el Martín Fierro de Oro de la radiofonía, Longobardi planteó su visión sobre el éxito. Pero más allá de su decisión, que develó que la venía macerando desde hace dos años,  entre risas dijo "Esta vuelta me hecho yo".

“Estoy hace 262 meses arriba de un Fórmula 1 andando a 300 kilómetros por hora y hace mucho tiempo que vengo viendo señales en algunas curvas", dijo Longobardi, que además adelantó que no renuncia a Radio Mitre, sino que a “Cada Mañana” seguirá contando con sus editoriales e incluso hará columnas en otros programas.|